La piñata y sus orígenes.

La piñata, Diego Rivera.

De las muchas tradiciones mexicanas que se conocen en el extranjero, quizá “La Piñata” sea una de las más reconocidas por todos.

Aunque de origen ciertamente incierto, parece que la Piñata mexicana tiene su nacimiento en Asia, China para ser correctos, donde existía una tradición que se remonta a la época del explorador veneciano Marco Polo, quien relata en las memorias de sus viajes un rito en el que se acostumbraba romper la figura de un buey relleno de semillas para celebrar el año nuevo chino.

Fusión de tradiciones.

Piñatas, parte de la cultura mexicana

Está tradición, llevada a Europa por los exploradores del siglo XII, fue después traída a América como parte de los trabajos de evangelización que se impusieron en el virreinato, donde los indígenas opusieron resistencia al cristianismo y los colonizadores buscaron diferentes métodos para buscar que la religión fuera aceptada en la nueva España, fusionando así, festividades y tradiciones indígenas con valores cristianos para buscar la evangelización de los pueblos que resistían aceptar la nueva religión como la única en su territorio.

De esta manera, la piñata fue una más de las fusiones y mestizajes culturales que ocurrieron y que formaron con el tiempo lo que hoy es México, un país donde el catolicismo contiene expresiones llenas de color e historia, que unen y entrelazan el pasado de dos culturas y el origen de una nueva.

Para fiestas y posadas, la piñata.

Tradicional piñata de 7 picos

Así, la piñata se fue transformando y formado parte de las más tradicionales festividades mexicanas, pero sobre todo de aquella conocida como las posadas, representación del momento clave del Cristianismo en que José y María buscan refugio pues la Virgen está a punto de dar a luz al mesías de esta religión.

En esta festividad la piñata, elaborada con una olla de barro y decorada con listones de papel brillante, refleja un significado religioso pues se agregan 7 picos o conos que forman una estrella y que representan los 7 pecados capitales castigados por la religión católica.

Del mismo modo, los colores brillantes y el fino papel con que se decora una piñata representan la tentación a los pecados que hemos de destruir golpeando la misma con un palo de madera, destruyendo así la representación del mal y por supuesto obteniendo una dulce recompensa por hacerlo.

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Otros orígenes.

La tradición de golpear la Piñata con los ojos vendados tiene su procedencia en otro de los posibles orígenes de la misma, los mayas, antiguos habitantes de la tierra donde vivimos, solían practicar un juego en el que con los ojos vendados, intentaban romper una olla de barro llena de chocolate la cual permanecía suspendida de una cuerda.

Sin importar cual es el origen de la piñata, hoy en día es un representativo de nuestra cultura en muchos sentidos y una tradición que las familias mexicanas intentan preservar, pues en sus colores y formas se esconde la historia de lo que hoy es México y el lugar que todos aman visitar.

¿Conoces otras tradiciones mexicanas además de la piñata? Deja tu comentario, nos encantaría saber qué estás pensando.